Un avión de transporte médico operado por Jet Rescue Air Ambulance se estrelló el viernes por la noche en Filadelfia, poco después de despegar, causando la muerte de siete personas y dejando 19 heridos. Según informó Fox News, la aeronave había pasado por un mantenimiento riguroso y era tripulada por un equipo altamente capacitado, lo que hace que el accidente resulte inesperado.
Shai Gold, director de estrategia corporativa y comunicaciones de la empresa, afirmó que no existían indicios previos de fallas técnicas. “Los registros de mantenimiento del avión eran impecables”, declaró Gold, agregando que la tripulación a bordo estaba conformada por profesionales experimentados. Además, aseguró que la compañía sigue estrictamente las especificaciones del fabricante en cada una de sus operaciones.
El incidente ha generado conmoción tanto en la comunidad médica como en la aeronáutica, dado el historial de seguridad de la empresa y la importancia de estos vuelos en el transporte de pacientes en estado crítico.
La reputación de Jet Rescue Air Ambulance en el sector de la aviación médica ha sido clave en el impacto del accidente. Según explicó Gold a medios locales, la empresa selecciona a sus pilotos y personal con estrictos estándares de calidad. “El equipo de vuelo es muy experimentado. Elegimos a los mejores de los mejores para operar estas ambulancias aéreas”, declaró.
La tripulación estaba compuesta por profesionales altamente capacitados que, además de su experiencia en vuelo, tenían un compromiso firme con la seguridad y el bienestar de los pacientes. “Ellos volaban con pasión, cuidaban a los pacientes con pasión y eran profesionales de clase mundial”, expresó Gold.
Desde la compañía recalcaron que su política de mantenimiento sigue estándares internacionales y que la aeronave accidentada no había presentado problemas previos. “Operamos con estándares de clase mundial”, insistió Gold. Sin embargo, reconoció que algo falló el viernes y que aún se desconocen las razones detrás del siniestro.
El accidente ocurrió en circunstancias que Gold calificó como “muy inusuales”. Según describió, la aeronave experimentó un descenso abrupto inmediatamente después del despegue, lo que resultó en un impacto fatal. “Es una situación muy extraña. No quiero especular, pero la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) investigará todo, y tendremos que esperar pacientemente sus conclusiones”, comentó.
La NTSB, responsable de investigar accidentes de transporte en Estados Unidos, ya ha iniciado las pesquisas para determinar las causas del siniestro. Entre los elementos que analizarán están los registros de mantenimiento, la comunicación de la tripulación antes del accidente y las condiciones climáticas en el momento del despegue.
Mientras avanza la investigación, Jet Rescue Air Ambulance ha asegurado su total cooperación con las autoridades y ha puesto a disposición toda la información necesaria para esclarecer lo ocurrido. La compañía también ha expresado su solidaridad con las familias de las víctimas y los heridos.
La tragedia ha causado un gran impacto no solo en los allegados de las víctimas, sino también en la comunidad médica y en el sector de la aviación. Las ambulancias aéreas cumplen un papel fundamental en el traslado de pacientes en estado crítico, permitiendo que reciban atención médica especializada en el menor tiempo posible.
El accidente ha generado cuestionamientos sobre los protocolos de seguridad en estos vuelos, aunque hasta el momento no se ha identificado ninguna falla específica. La empresa ha insistido en que su historial de seguridad es sólido y que este evento representa una anomalía dentro de sus operaciones.
Por otro lado, la comunidad médica ha expresado su pesar por la pérdida de los profesionales de la salud que viajaban en la aeronave. Equipos de emergencia y hospitales de la zona han trabajado intensamente para atender a los heridos, quienes se encuentran en distintas condiciones de salud.
Aunque todavía no se han determinado las causas del accidente, los antecedentes de la empresa y las declaraciones de Gold sugieren que se trató de un evento excepcional. La NTSB llevará a cabo un análisis exhaustivo que incluirá la revisión de los motores, los sistemas de control y las comunicaciones del vuelo.
Por el momento, se espera que los resultados preliminares de la investigación tarden varias semanas. Mientras tanto, la comunidad aeronáutica sigue atenta a las conclusiones que puedan ayudar a prevenir tragedias similares en el futuro.