Luego de conocerse las listas de candidatos para las elecciones de septiembre en la provincia de Buenos Aires, en las que hay al menos 15 intendentes en actividad que se postulan sólo dos años después de haber sido electos al frente de sus municipios -lo que implicaría que o bien deberán dejar su cargo actual o bien no ocuparán su banca en caso de ser elegidos-, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se metió en la campaña y cuestionó fuertemente las candidaturas testimoniales al afirmar que una maniobra de tales características «sería un fraude».
«Estoy en contra de las candidaturas testimoniales. Si uno se presenta a una elección tiene que ser capaz de saber que tiene depositados una importante cantidad de votos, algunos más, otros menos, no importa quién, y hay que cumplir con eso», expresó este martes Bullrich durante una entrevista con LN+.
Sin embargo, inmediatamente después aclaró: «Hay veces, cuando un Gobierno asume, que necesita determinada gente que fue elegida como diputada o senadora para un determinado cargo. Pero volver al mismo cargo es total y absolutamente un fraude. Hacerse concejal siendo intendente, es como un fraude total«.
Al respecto, la ministra mencionó como una excepción el caso de que un presidente necesite a una persona que fue elegida para un cargo determinado distinto a aquel para el que se postuló. «La regla tiene que ser que el que se presenta tiene que asumir. Sería un fraude hacerlo de otra manera», sentenció.
La ministra expresó además que «es muy importante que aquel que se presenta a una candidatura lo haga porque quiere representar a aquél que lo votó», ya que «aquél que lo votó, lo vota con la convicción de que esa persona va a cumplir esa tarea», y también aprovechó la ocasión para cargar contra Sergio Massa por las elecciones de 2009: «Irse un día, como pasó en las testimoniales donde Massa era candidato en 2009, todos entraban y salían… Eso es un fraude».
ES