OPINIÓN
El presidente uruguayo sigue los lineamientos internacionales de su par brasileño Lula da Silva.
El Frente Amplio de Orsi y el Partido de los Trabajadores (PT) del brasileño Lula son primos hermanos.
Ambos se fundaron por ex sindicalistas frustrados, por pseudo intelectuales admiradores de la dictadura comunista cubana, y por funcionarios públicos que vivían del Estado sin trabajar.
En el caso del Frente Amplio se fundó en 1971, y el PT brasileño en 1980.
| La Derecha Diario
Cuando Tabaré Vázquez asumió su primera presidencia en 2005, uno de los primeros en saludarlo y felicitarlo fue Lula, que en ese momento al igual que ahora era presidente de Brasil.
Vínculos Frente Amplio – PT
Son conocidas las relaciones entre los dirigentes frenteamplistas y los del PT brasileño.
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Estos dirigentes comparten su devoción por las dictaduras de Cuba, Venezuela y Nicaragua, por hacer crecer al Estado asfixiando los derechos individuales, y por multiplicar los impuestos castigando la clase media y al sector productivo.
En la noche del viernes 28 de febrero, a horas de ser investido como presidente de la República, Yamandú Orsi participó en un asado en la residencia del embajador de Brasil en Montevideo con los mandatarios de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, de Chile, Gabriel Boric, y de Colombia, Gustavo Petro.
En esa charla es posible que Orsi le haya asegurado al presidente brasileño una subordinación en materia de política exterior.
Ya está dando sus primeros pasos como presidente siguiendo las directivas de Brasilia y alejadas del interés nacional de los uruguayos.
Al servicio de Brasil
Se está comportando como un vulgar seguidor de la cancillería brasileña, y no como el legítimo presidente de Uruguay que defiende el interés de los uruguayos.
Esto podría perjudicar a Uruguay en su vínculo con la Argentina de Javier Milei. El presidente argentino cree en la libertad y en menos Estado, Orsi y Lula creen en un socialismo trasnochado y en un Estado asfixiante.
El relacionamiento entre dirigentes frenteamplistas y los del PT parece que va más allá de simple afinidad ideológica.
Quizás yay algún tipo de financiamiento oscuro que desconozcamos.
No es raro que los partidos políticos de la ultra izquierda latinoamericana se ayuden entre sí económicamente.
Más allá de eso, lo preocupante es que el gobierno de Orsi parece que va a actuar a las órdenes de Brasilia y siguiendo las directivas de Lula, dándole la espalda al interés de Uruguay en materia internacional.
Orsi debería estar a favor de los uruguayos y de la libertad, y no de un país extranjero que no cree en la libertad individual.
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