Distinguida y refinada. Popular y de masas. Playa Grande y la Bristol. Como quizás ningún otro destino veraniego y a punto de cumplir 151 años (el 10 de febrero), el espejo de Mar del Plata devuelve una nítida imagen de lo que podría representar la actual y vieja Argentina. Aristocracia y Tercer Cordón del conurbano, en una misma ciudad tan deliciosa como extraordinaria que desde la década del 40 se convirtió en el polo turístico interno más importante del país.
Como en casi todo, la grieta contaminó el inicio de estas vacaciones. Mientras que a fines del año pasado, parte de la oposición encabezada por el kirchnerismo y la izquierda auguraban una merma de veraneantes debido al ajuste de Javier Milei, en el Gobierno libertario festejaban la mejora en el poder adquisitivo de los salarios provocado por la baja de la inflación.
¿Qué ocurrió en enero en Mar del Plata? Clarín accedió a un informe con varias cifras que si bien son preliminares, históricamente suelen coincidir bastante con los resultados definitivos.
Los datos arrojan que durante el primer mes de vacaciones que acaba de terminar, en La Feliz ingresaron 1.377.288 visitantes. Comparado con el mismo enero del año pasado fueron sólo 23.413 personas menos. Es decir, una caída del 1.7%.
Según el informe que realizó la Municipalidad de General Pueyrredón, en base a datos de entidades descentralizadas que reúnen a los oferentes turísticos de la ciudad, durante enero hubo un marcado aumento en el ingreso de jóvenes que suelen desplazarse en grupos. También en el sector de veraneantes que podría representar la clase media y la media alta en relación con los visitantes de los sectores más populares.
Los apart hoteles, sobre todo del Sur, fueron los que más crecieron con un 2,6%, seguidos por los hoteles 4 estrellas con una suba de 2,1% y los hoteles 3 estrellas con 1,8%. En el otro lado de la luna están los hoteles más baratos: los de 2 estrellas cayeron un 3.9% y los hostels 2.7%.
Un párrafo aparte deberían llevarse los hoteles sindicales, que proliferan en MDQ como en ningún otro destino del país. Durante este enero, los contingentes de empleados sindicalizados cayeron un 10.3%, una caída considerable que altera los datos finales como ningún otro sector.
«En promedio, se podría establecer que una habitación doble con media pensión en un hotel sindical le podría costar al afiliado alrededor de $50.000 por día. En general y como mínimo, el tiempo de estadía fijado es de una semana. No es demasiado frecuente que en el pico de temporada una familia consiga lugar para sólo un fin de semana», indica Bernardo Martin, presidente del Ente Municipal de Turismo (EMTUR).
«Los gremios actualizaron la tarifa de sus hoteles y pensiones. Y, a diferencia de otros años, por cuestiones económicas no aplicaron beneficios ni promociones a sus trabajadores«, agrega Martín.
En el plato más pesado de la balanza, con datos positivos, además del boom de jóvenes (el 45% de todos los turistas fueron de la franja que va de 18 a los 35 años), los operadores turísticos aseguran que la Ciudad logró defender y seducir a la clase más pudiente, el turista que busca algo de exclusividad y gasta más. Todo esto, según indican, a pesar del dólar barato que generó un incremento de argentinos en el exterior.
El consumo creció durante el mes más fuerte del verano, a pesar de la motosierra de Javier Milei. Para este 2025, Mar del Plata sumó grandes cadenas gastronómicas como Dandy, Starbucks y Kentucky. «Las ventas en la costa estuvieron de bien para arriba», le dice a Clarín el gerente de una de esas marcas.
En EMTUR también resaltan la mezcla de turismo joven y dispuesta a gastar que empujó el alquiler de casas y departamentos en las playas de Sur. «El corte que tenemos hasta el 20 de enero nos arroja que subió entre un 8% y 10% en términos nominales el alquiler de viviendas», informaron.
En esas playas hubo afters casi todos los días. Son las juntadas de jóvenes después del día de playa. Los organiza el balneario desde las 18 y cobran una entrada de $30.000 aproximadamente. Se realizaron multitudinarios recitales de DJ internacionales.
En enero,las autorizaciones de es este tipo de eventos masivos fueron 78 en total, desde recitales, fiestas electrónicas y grandes show. Una cifra que representa un incremento del 28% en comparación con las 61 habilitaciones del mismo período de la temporada anterior.
“Mar del Plata es escenario para recitales, fiestas electrónicas y espectáculos de gran escala. Esto es positivo desde el punto de vista turístico y desde la generación de empleo en la producción y logística de estos eventos” señalaron desde la ciudad balnearia gobernada por el intendente Guilermo Montenegro. En Mar del Plata vive el 1.5% de la población del país, unas 580.000 personas, casi las mismas que en la Capital de la Provincia, La Plata. “Se trajeron experiencias que son furor en todo el mundo la ciudad no tiene que depender del tipo de cambio, de subsidios y sobre todo del clima”.
No voy en tren ni en avion: viajo en auto
Del 1.377.288 visitantes que pasaron por MDQ en enero, el 81,3% ingresó en automóviles, cifra que se mantuvo en comparación con 2024. Lo mismo pasó con la cantidad de gente que se traslado a La Feliz en ómnibus y tren. En micros entraron casi 14% de los turistas y 3.3% en ferrocarril.
Dato curioso: el tren sólo trasladó a Mar del Plata el doble de gente que la que arribó en avión. Unas 43.000 (3,2%) personas llegaron por ferrocarril contra casi 21.000 (1.5%) por vía aérea.
MG