29/01/2025 18:07hs.
«Necesita hacer goles», había dicho hace unos días Diego Simeone sobre su hijo, Giuliano, quien atraviesa una gran temporada pero que, como había destacado su padre, le faltaban los tantos. Y este miércoles llegó la respuesta del chico: abrió el marcador, asistió en el segundo y se transformó en la gran figura del triunfazo del Atlético de Madrid ante el Red Bull Salzburgo por 4-1, en la última fecha de la fase regular de la Champions League.
El Atlético dependía de sí mismo para meterse a los octavos de final. Una victoria bastaba para que el equipo se ahorre ir a los playoffs y se meta de lleno en la próxima instancia. Con ese panorama, Giuliano, con 22 años, sacó el pecho por el equipo y mostró, desde el inicio, una energía notable: ya en cuatro minutos marcó el gol que venía pidiéndole su papá y, otros ocho minutos después, se encargó de asistir, tras eludir con un sombrero al arquero, a Antoine Griezmann para el 2-0.
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